En un aula cotidiana, como en la que podemos estar todos, podemos observar a nuestros lados a los compañeros que tenemos, y según su modo de actuar, podemos ubicarlos en la siguiente clasificación:
- El matado
En este
grupo se encuentran los denominados “frikis”, este grupo se encuentra en vías
de extinción en prácticamente en todas las clase. Se caracteriza por el
conocimiento absoluto de todo y sobre todo, y aunque parezca imposible son
personas que estudian los exámenes día a día y no la última noche antes del
examen. Los deberes los tienen siempre hechos y es raro cuando no están
ordenados. Dentro de este grupo tan exclusivo, podemos encontrar dos tipos: los
buenos, que son los que ayudan al necesitado; y los malos, que lo único que
hacen es privatizar el conocimiento de las cosas. La frase más empleada por
este grupo es:” ¡Yo, yo! .
- El malote
Este tipo de
alumnos no tiene por qué ser de los más inteligentes, pero son malos y fuertes
como para tener lo que quieran, cuando quieran, y cuanto quieran. Es muy característico
que roben la comida a los demás, pongan apodos ofensivos a la gente. La función
de este alumno en la clase es hacer la vida imposible a los alumnos más
débiles. Suelen estar rodeados de alumnos que son su guardaespaldas. La frase
más empleada es: “Te veo a la salida,
marica”
- El graciosito
Es una de
las personas más importantes de la clase, cuya misión es hacer más amenas las
clases. Suelen caracterizarse por su buen humor, y por hacer el comentario
gracioso en el momento indicado. El punto álgido de este grupo, es cuando hace
reír al profesor. A este tipo de alumnos les gusta decir: Si el trabajo es
salud, ¡Viva la enfermedad!
- El pelota
Es un grupo
bastante cansino, porque la primera vez que te dicen un elogio te lo tomas al
pie de la letra y te gusta, pero es muy característico de este grupo la reproducción de las mismas frases. Las más usadas son: “¡cómo me gusta su asignatura!”.
- El pijo
Este alumno
está constantemente hablando de sí mismo. Todas las prendas que llevan, superan
los cincuenta euros. Constantemente habla de sus posesiones, como puede ser:
coches, barcos y casas Habla arrastrando las palabras así, y no pueden faltar muletillas
como "en plan…", "o sea" entre otras. La frase más empleada
es: “pues yo tengo más… que tú”
Manu.A
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